domingo, 18 de agosto de 2013

PAREJA DE ANCIANOS RECIBIÓ CASA, ALIMENTOS Y ATENCION MÉDICA

Alcalde del Callao les llevó ayuda y esperanzas tras
escuchar pedido de religiosa 
Una pareja de ancianos que dormía en una vivienda de madera y cartón sin techo y comía gracias a la caridad de sus vecinos, tuvo ayer una feliz sorpresa, al recibir de parte del alcalde del Callao, Juan Sotomayor, una casa prefabricada de 30 metros de área, alimentos para un mes, cama, colchón y atención médica gratuita, así como medicinas, en una zona de Oquendo.
Tomasa Llantoy Pisco de 76 años vivía un vía crucis, pues debía recoger botellas de plástico todo el día para lograr unos soles que le permita comprar algunos alimentos para su esposo de 91 años, Efraín Hurtado Quispe, aquejado de cáncer a la próstata y otros males que lo tienen postrado en un viejo colchón, en su humilde vivienda en Oquendo.
Su caso fue conocido a través de la hermana Gloria de la Cruz, dominica Santa Rosa de Lima y fue el Alcalde chalaco, Juan Sotomayor, quien de inmediato respondió y llegó hasta dicha zona para alegrar la vida de Tomasa. Los doctores del programa municipal “Médicos de cabecera” le hicieron un chequeo a Efraín y determinaron que se le deben efectuar diversas pruebas, como análisis y resonancia magnética.
Sin poder contener las lágrimas, Tomasa agradeció el gesto del alcalde Sotomayor, al ver la gran cantidad de cosas que le entregaron. “Hace 40 años llegamos de Apurímac y estamos luchando día a día para poder alimentarnos. Ahora tengo esperanzas gracias a su buen corazón”, dijo Tomasa.
Juan Sotomayor le explicó que los alimentos: dos sacos de arroz, aceite, leche, azúcar, conservas de pescado y otros productos, le iban a llegar cada mes. Igualmente, los “médicos de cabecera” iban a visitar a su esposo para coordinar después su traslado a un centro médico y le iban a proporcionar gratis todos sus medicamentos necesarios.
También le entregaron una cama, colchón, almohadas y juegos de sábanas, para que a partir de este día pueda dormir con comodidad y sin miedo a que la lluvia los moje.




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