Actividades realizadas en esos talleres pueden generar grandes explosiones. OSINERGMIN les otorgó licencias
La Municipalidad del Callao identificó un peligro recurrente en varios grifos de la provincia constitucional, pues son varios los establecimientos que además de vender combustibles cuentan con talleres de conversión de motor a gas natural a pocos metros de los depósitos de los hidrocarburos.
Durante un fuerte operativo realizado por la Gerencia de Comercialización del municipio chalaco, grande fue la sorpresa al constatar que estos establecimientos cuentan en muchos casos con licencias otorgadas por OSINERGMIN, sin embargo el gerente general de Comercialización, Dr. Miguel Gonzales Huapaya, afirma que “es un peligro latente contar con talleres de conversión a gas anexados a los grifos, pues una chispa generada por los sopletes con los que aseguran los sistemas de gnv podrían originar explosiones e incendios de gran envergadura”.
Gonzales Huapaya afirmó no comprender el por qué en años anteriores OSINERGMIN ha otorgado permisos de ese tipo. Asimismo precisó que la Municipalidad del Callao revisará cada una de las licencias de funcionamiento, pues en algunos casos se han detectado irregularidades, uno de ellos es el caso del taller AGUKI, ubicado en la Av. Elmer Faucett, cerca al óvalo Cantolao, el cual no solo contaba con un taller de conversión, sino que además vendían sandwichs haciendo uso de una parrilla muy cerca a los depósitos de combustible.
La Municipalidad del Callao identificó un peligro recurrente en varios grifos de la provincia constitucional, pues son varios los establecimientos que además de vender combustibles cuentan con talleres de conversión de motor a gas natural a pocos metros de los depósitos de los hidrocarburos.
Durante un fuerte operativo realizado por la Gerencia de Comercialización del municipio chalaco, grande fue la sorpresa al constatar que estos establecimientos cuentan en muchos casos con licencias otorgadas por OSINERGMIN, sin embargo el gerente general de Comercialización, Dr. Miguel Gonzales Huapaya, afirma que “es un peligro latente contar con talleres de conversión a gas anexados a los grifos, pues una chispa generada por los sopletes con los que aseguran los sistemas de gnv podrían originar explosiones e incendios de gran envergadura”.
Gonzales Huapaya afirmó no comprender el por qué en años anteriores OSINERGMIN ha otorgado permisos de ese tipo. Asimismo precisó que la Municipalidad del Callao revisará cada una de las licencias de funcionamiento, pues en algunos casos se han detectado irregularidades, uno de ellos es el caso del taller AGUKI, ubicado en la Av. Elmer Faucett, cerca al óvalo Cantolao, el cual no solo contaba con un taller de conversión, sino que además vendían sandwichs haciendo uso de una parrilla muy cerca a los depósitos de combustible.
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